Mi estadía en los Hampton este verano se vistió del estilo y el diseño puramente americano de Ralph Lauren, quien abrió en la calle principal de South Hampton una de sus tantas tiendas. En esta oportunidad, a diferencia de otras, lo hizo en un lugar icónico, mágico, un pequeño cottage a pocos minutos en helicóptero o unas dos horas y media en auto desde la ciudad de New York y donde por décadas los ricos y famosos han disfrutado de grandes mansiones para pasar sus vacaciones de verano frente al nostálgico mar.
Aunque no me gusta hablar en primera persona en mis artículos, en este es inevitable. Desde que tengo memoria he vestido piezas de Ralph Lauren: desde su clásica Polo, pasando por su exquisita ropa de cama, hasta sus coloridos zapatos de tela, infaltables en mi guardarropa, por lo que puedo dar fe absoluta de la calidad, la comodidad y el estilo en cada uno de sus diseños. Inclusive, para hombres como yo que entramos en la categoría de los big tall, no hay nada que de su marca se me escape, bien sea Black Label, Polo Ralph Lauren, RLX o Purple Label.
Sus tallas son completas y sus cortes impecables que se ajustan al cuerpo perfectamente, pero sobretodo, sus materiales frescos, texturas suaves al tacto y durabilidad que las hace perdurar en el tiempo y reusar en cada estación del año.
Ralph Lauren es sinónimo de americano, del Made in USA, de su estilo de vida simple pero elegante y sobretodo confortable plasmado en cada diseño identificado por su inconfundible logo del jinete en el caballo de Polo. Cuando el hombre o la mujer los usa transmite comodidad, riqueza de texturas y un catalogo de colores infinitos para combinar con cualquier temporada.
Ralph Lauren, de padres inmigrantes rusos, nació en New York el 14 de octubre de 1939. En 1967 lanzó su marca de corbatas luego de trabajar en una fábrica de estos artículos que le dio la inspiración para crear sus piezas de una forma elegante, sobria y que definitivamente impactó la moda varonil de aquellos tiempos. A partir de ahí todo lo demás es historia, ya que revolucionó la moda americana y la elevó a un estilo elegante sin perder su esencia o hacerla vermuy europea.
En pleno éxito de su marca e inspirado en su esposa, quien compraba ropa de hombres para montar a caballo, lanzó su línea para mujeres logrando un triunfo inmediato. La línea estuvo acompañada por su icónico logotipo del jugador de polo a caballo en las muñecas de las camisas y luego presente en todas sus prendas. De ahí hasta diseñar el vestuario para la adaptación cinematográfica de El gran Gatsby,el crecimiento de la marca ha sido exponencial.
Actualmente, Polo es una marca con presencia mundial que abarca ropa de hombres y mujeres, y accesorios para el hogar. También tiene espacio para mascotas, zapatería, peletería, perfumes y mucho más. Todo dentro de un estilo propio perfectamente reflejado en las fotografías de Bruce Weber que vemos en su publicidad y que crean un ambiente country típicamente americano que va mas allá de vestir a un completo concepto y estilo de vida.
Ralph Lauren lleva el sinónimo de americano tan lejos que es el encargado oficial de diseñar todos los uniformes para el equipo olímpico de Estados Unidos, así como también para Wimbledon. Recientemente celebró sus primeras cinco décadas de carrera con un desfile de modas y una cena de gala que reunió a personalidades de todo el mundo, quienes compartieron desde el Central Park cinco décadas de éxitos. Desde allí presentó su nueva colección 50 aniversario como broche de oro a tal magna celebración y a su trayectoria.
Hoy, desde South Hampton, solo les puedo decir que no dejen de visitar esta peculiar tienda en este fantástico pueblo de mar. El ambiente es mágico, hermoso, realmente refrescante y lleno de color en los pocos pies cuadrados que integran el antiguo cottage de mas de cien años de antigüedad y que con su particular renovación logra transmitir la magia que Ralph Lauren imprime en cada una de sus piezas.
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