Las imágenes hablaban por sí mismas: un pueblo cansado, hambriento y sin miedo tomaba las calles de varios puntos de Cuba para pedir por su libertad. Las voces sonaban al unísono y cada vez se sumaban más personas a un hecho que, además de espontáneo, fue histórico. 

Desde 1994 con el Maleconazo no había ocurrido en la Isla una protesta de la magnitud de la que ocurrió el 11 de julio de 2021, un día que sin dudas también tendrá que agregarse al calendario de eventos que han marcado la historia del porvenir del pueblo cubano. 

Pero ¿por qué los cubanos salieron a protestar? No es un secreto que el régimen cada día arrecia más las cadenas con las que ha mantenido al pueblo oprimido, secuestrado y dormido. A esto se  le sumó una crisis mundial: la pandemia de Coronavirus, que fue agravando  la situación a tal punto que los hospitales, ya en pésimas  condiciones, se desbordaron.

Esto a su vez desencadenó un aumento en las muertes, más escasez de medicina, falta de personal médico y el agotamiento de la paciencia de los cubanos. Con esto, una isla que ya estaba sumida en la pudrición continuó su declive. Y el declive llevó a los cubanos a las calles, a entonar el himno nacional y a gritar que ya no tenían miedo. 

Pedían, en pocas palabras, una vida más digna, el derecho a expresarse libremente, tener el derecho de escoger a sus líderes, recibir un salario digno, poder alimentarse debidamente, acceso a medicinas, no más cortes de electricidad y que el régimen comunista abandonara el poder. 

Es tiempo de un cambio y ese cambio tiene que ser ahora. Los jóvenes cubanos están listos para defender su patria, sin ataduras, sin ideologías obsoletas y sin el yugo opresor de los Castro. Cuba merece ser libre, el mundo lo sabe y el mundo lo apoya. 

La falsa idea de un sistema comunista en funcionamiento se ha ido desmoronando en estos tiempos más que nunca. La mentira no puede cimentarse más en Cuba. No hay cabida para ella, el pueblo tiene que ser libre. 

El 11 de julio es ya de por sí una fecha de gran importancia y, como cada vez que el pueblo ha protagonizado un evento así, quedará en la memoria colectiva de los cubanos en la isla y en todo el mundo, quienes también salieron a las calles a apoyar a sus hermanos. 

La valentía individual de cada cubano hizo aún más grande la del pueblo. ¡Viva Cuba libre!