Era la noche del 17 de febrero de 1963 y el poblado de Palmira, en Cienfuegos, estaba de fiesta. Tocaría Benny Moré y su Banda Gigante, había prometido que lo haría y lo hizo, pese a lo agónico de su enfermedad. Entre buches de sangre, medicinas y alcohol cantaría para su pueblo como nunca lo había hecho. Dos días después moría en un hospital de La Habana el cantante más grande que ha dado Cuba. Había nacido leyenda.

Nació un 24 de agosto de 1919 un día marcado como San Bartolomé, por eso lo bautizaron como Bartolomé Maximiliano Moré Gutiérrez, aunque pasaría a la historia con el nombre de Benny Moré. Fue el mayor de 18   hermanos y tuvo que encarar una infancia llena de carencias y vicisitudes que lo hicieron trabajar desde muy temprana edad en las duras labores del campo. También desde muy joven se aficionó por la música y el canto y su primo hermano Enrique Benítez, conocido después como el Conde Negro, le enseñó a tocar la guitarra. Con 17 años fundó su primer conjunto.

En 1940 en Vertiente, Camagüey, se despidió de su madre en las puertas del Hotel Ritz y se fue de nuevo para la capital cubana a probar suerte. En La Habana trabajó intensamente, primero con el Conjunto Cordero y luego con el Septeto Cauto de Maso Borgella, hasta que el destino y una serie de situaciones hicieron que se integrara el Conjunto de Miguel Matamoros. En 1945 embarcó con ellos hacia México.

De esa gira no regresó más a Cuba hasta 1950. En tierra azteca se internacionalizó como cantante y grabó en exclusiva para el sello RCA Víctor con las orquestas de Mariano Mercerón, Arturo Núñez, Rafael de Paz y el gran Dámaso Pérez Prado.

Ya en Cuba volvió a trabajar con la Orquesta de Mercerón para la Cadena Oriental, para después pasar a la estación radial RHC Cadena Azul, propiedad de Trinidad Velazco. Allí se unió laboralmente con Bebo Valdés y el naciente ritmo batanga. También trabajó en Radio Progreso con la Orquesta de Ernesto Duarte hasta que en 1953 fundó su Banda Gigante, con la que debutó el 3 de agosto en el Programa Cascabeles de Candado de CMQ Radio.

Entre 1956 y 1957 Benny Moré y su Banda Gigante realizan exitosas giras por Venezuela, Jamaica, Haití, Colombia, Panamá, México y Estados Unidos. SU discografía cuenta con 250 registros fonográficos y populares temas como Mucho corazón, Bonito y sabroso y Mata siguaraya, entre muchas otras.

Benny Moré sigue eterno con su sombrero alón y su bastón en mano dirigiendo su tribu, como le llamaba cariñosamente a su Banda Gigante, componiéndole a los pueblos de su amadísima Cuba y haciéndonos soñar con sus boleros y bailar hasta el delirio con su sones y guarachas. 

Para muchos es el Quinto Beatle (sin melena ni pantalones de cuero) por su voz, carisma e innovaciones musicales. Tomó lo mejor del son oriental de Matamoros y la fuerza armónica y rítmica del mambo de Pérez Prado y lo hizo música cubana en la creativa sonoridad de su Banda Gigante.

A 100 años de su nacimiento solo nos queda por decir: ¡Benny Moré, qué bueno canta usted!