Por Raúl Hernández

Desde hace casi cuatro décadas St. John Clinic Medical Center forma parte del paisaje citadino de la calle 29 del noroeste de Miami, en pleno corazón de Wynwood. Allí han sido testigos de las transformaciones...

Desde hace casi cuatro décadas St. John Clinic Medical Center forma parte del paisaje citadino de la calle 29 del noroeste de Miami, en pleno corazón de Wynwood. Allí han sido testigos de las transformaciones que se han producido en este vecindario mientras se han ocupado de mejorar la salud de sus residentes.

Hablamos con Reynaldo Cruz Peraza, C.E.O. desde hace casi un cuarto de siglo de St. John Clinic Medical Center.

¿Cómo definiría a St. John Clinic Medical Center?
Somos un negocio de familia que lleva 38 años en el mercado de salud. Cuando mi padre comenzó a manejar esta clínica había ocho más en Wynwood, hoy queda solo St John.

Aquí comencé a trabajar desde que tenía 15 años. Venía en el verano para ayudar a mi padre en lo que fuera. Lo mismo limpiaba el piso que los baños. Después comencé a trabajar oficialmente como asistente de mi padre que era entonces el C.E.O., y a partir de 1995 asumí la dirección del centro.

¿Qué servicios prestan a la comunidad en este centro de salud?
Somos un centro médico de servicios primarios, con consultas de Pediatría y Medicina General. Contamos además con laboratorios, servicios de Farmacia y también de Rayos X. Nuestro trabajo está enfocado en la Medicina Preventiva, por eso damos seguimiento constante a nuestros pacientes a través de consultas y chequeos periódicos, para evitar que tengan la necesidad de acudir a una sala de emergencias, donde los servicios son más costosos.

¿Qué ha significado trabajar durante tantos años en un vecindario multicultural?
Yo creo que cada quien debe estar donde más lo necesiten. A nuestra clínica vienen pacientes de Little Haiti, Overtown, Liberty City, Brownsville, Allapattah, Edgewater y por supuesto de Wynwood. Estamos hablando probablemente de los vecindarios más necesitados de Miami, que en ocasiones son también los más agradecidos.

Es muy reconfortante ayudarlos. No solo estoy hablando de nuestros servicios médicos, me refiero a ponerle una mano en el hombro, a escucharlos. Eso puede hacer la diferencia. Lograr ponerle una sonrisa en el rostro cuando se sienten mal porque están enfermos. Y esa precisamente es nuestra política. Es muy importante tratar siempre de darles cariño a los pacientes y transmitirles paz. Eso lo aprendí de mi padre.

Hay un Wynwood de arte, de galerías, de restaurantes y turistas, pero también hay un Wynwood de gente muy necesitada, para servirle a ellos está aquí St. John Clinic Medical Center.

¿Desarrollan ustedes algún tipo de actividad social con los vecinos de esta área?
Claro que sí. Aquí nunca hemos dejado de regalar pavos el Día de Acción de Gracias, ni de traer a Santa en Navidad para que nuestros pacientes se tomen fotos con él y reciban sus regalos. No hay fecha en el calendario que pase inadvertida para nosotros y todas las celebramos con nuestros pacientes, porque ellos son nuestra razón de ser.

De igual manera, en dos ocasiones hemos auspiciado a equipos de baloncesto y cada año cuando comienza el curso escolar regalamos mochilas con útiles escolares. También vamos a las escuelas a inmunizar con vacunas a los estudiantes.

¿Cómo ve el futuro de St John Clinic Medical Centers?
Continuaremos ofreciendo lo que siempre hemos dado, servicios de salud, de calidad y mucho cariño. Ayudando a la comunidad en todo lo que podamos y enfrentando las batallas que están por venir, como lo hicimos hace poco menos de un año con la epidemia de zica.

Creo que he cumplido con mis objetivos y seguiré haciéndolo. No resultó fácil ponerme en los zapatos de mi padre para continuar el excelente trabajo que él había hecho, pero hoy me siento orgulloso de haber continuado su obra.

Aquí en St. John he visto venir a niños pequeños de la mano de sus padres. Los he visto crecer y después los he visto convertirse en hombres y mujeres que traen a sus hijos. Eso es muy reconfortante. Por eso seguiremos aquí, para seguir ayudando y agradeciendo a esas familias que generación tras generación han confiado en nosotros.